La Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio avanza en la licitación de las actuaciones de renovación urbana del Barrio de La Viña de Lorca, cuyo plazo de presentación de ofertas ya ha concluido y que cuenta con un presupuesto cercano a los nueve millones de euros.
Así lo manifestó hoy la directora general de Territorio y Vivienda, Yolanda Muñoz, durante el acto de colocación de la primera piedra de los edificios Domus Aurea y Viña Nueva situados en este barrio lorquino.
Yolanda Muñoz adelantó que la Consejería va a iniciar la valoración de los proyectos presentados por las distintas empresas para poder adjudicar las obras lo antes posible.
Los trabajos consistirán en la renovación de infraestructuras urbanas, la liberación de espacio público y la peatonalización de viales con el objetivo de fomentar la accesibilidad, permitir la conexión entre barrios, así como actuaciones de eficiencia energética y sostenibilidad.
También se busca la máxima integración entre ciudad y naturaleza mediante la integración del paisaje urbano, con la introducción y actualización de las infraestructuras para que contribuyan al ahorro energético. Asimismo, el proyecto tiene como objetivo fortalecer la unidad e imagen de este barrio.
Además, la Comunidad también contempla actuaciones en los barrios de San Fernando, San Diego, Alfonso X, San José, San Pedro y otras zonas de los barrios Altos, así como las obras de accesibilidad al Castillo de Lorca.
La inversión total de la Comunidad para este conjunto de actuaciones de renovación urbana alcanza una dotación aproximada de 53 millones de euros para 2013-2014.
Con ello, explicó la directora, “la Comunidad pretende facilitar el desarrollo económico, comercial y la movilidad, con infraestructuras que aseguren la accesibilidad integral, y recuperar la imagen global de la ciudad”.
Reconstrucción de la ciudad
Yolanda Muñoz explicó que el inicio de las obras de reconstrucción de los edificios Domus Aurea y Viña Nueva eleva a 644 las viviendas de Lorca demolidas tras los terremotos que ya se encuentran en fase de reedificación, del total de 1.150 que fueron derribadas a consecuencia de la catástrofe.
Los dos inmuebles suman 116 pisos y 142 garajes y sus proyectos de reedificación han sido tramitados mediante sendos planes especiales de reforma interior (PERI).
El PERI ha permitido incrementar la altura máxima y el fondo edificable, con lo que ganarán una altura y ahora tendrán cinco plantas.
La directora general de Territorio y Vivienda manifestó su satisfacción por el esfuerzo de los vecinos y “por su nuevo enfoque de los edificios que han planteado, porque con la aprobación del Plan especial de la zona consiguen un nuevo modelo de reconstrucción más compacta y compatible con otros espacios”.