El Alcalde de Lorca, Francisco Jódar, y la Concejal de Empleo, Eulalia Ibarra, han entregado esta mañana al presidente de la Hermandad de 'La Curia', Diego Domínguez, el trono de la Virgen de la Soledad que ha sido restaurado en los talleres de la Concejalía de Empleo del Ayuntamiento de Lorca entre diciembre de 2014 y marzo de 2015 de los daños que sufrió en las inundaciones de septiembre de 2012, que se sumaron a los ocasionados por el paso del tiempo.
El Primer Edil ha explicado que "10 alumnos del taller de restauración, dorado y policromía del proyecto Urban Color cofinanciado por Fondos FEDER; un maestro de carpintería; así como monitores de pintura, electricidad y cerrajería han participado en la reparación y mejora realizada por el Consistorio Municipal en este trono que viene desfilando desde 1966, perteneciendo al Paso Encarnado, pero en 2010 pasó a ser utilizado por el conocido como Paso Negro en el desfile del Domingo de Ramos".
El Alcalde ha subrayado que "el importante deterioro de la obra ha obligado a hacer una actuación integral, tanto de estructura interior como en la decoración labrada y dorada, tallándose nuevos elementos iconográficos como el escudo colegial de los abogados de Lorca y el anagrama de María, emblema de la Hermandad de la Curia. Cabe destacar que el proceso de restauración se inició con el desmontaje general para poder intervenir a fondo en cada elemento. Se decaparon los dorados y aparejos para arreglar la superficie y dorarlos con pan de oro, bruñirlos con útiles de ágata, protegerlos con laca y patinarlos. En cuanto al interior, se ancló la estructura con escuadras de forja, al mismo tiempo que se sustituían los chapados de madera mejorando la estructura de soporte. También se han desarrollado trabajos de electricidad, reponiendo la instalación interior, aportando mecanismos de encendido y protección y apostando pos la iluminación led con regulador de intensidad tanto en su interior como en su exterior.
Francisco Jódar ha subrayado que desde el Ayuntamiento seguimos trabajando para mejorar el patrimonio de elementos que conforman las procesiones lorquinas, pero además en este caso ha servido para que un grupo de lorquinos aprenda un oficio a través de estos trabajos prácticos.