El concejal del Grupo Municipal Socialista, Antonio Navarro ha celebrado la aprobación de la construcción de la tubería que transportará el agua de la desaladora de Águilas, desde el Cerro Colorao hasta los campos lorquinos, tal y como han reclamado en numerosas ocasiones desde el PSOE. Sin embargo, lamentan que de nuevo los gestores del dinero público estén más pendientes del titular y la foto y en cortar la cinta que en el verdadero servicio que se debe dar con una inversión millonaria como esta.

Navarro ha asegurado que para que estas obras, recientemente aprobadas, sean realmente útiles, deben dotarse de unas balsas reguladoras, seis concretamente, con tres puntos de elevación, a lo largo del recorrido de esa tubería. Elementos que el Gobierno de Mariano Rajoy, a través del Ministerio de Agricultura, ni contempla.

El edil socialista explica que el cometido de esas "balsas reguladoras" es, por una parte, almacenar el agua desalada que vaya produciendo la desaladora, para regular su consumo según las necesidades de los agricultores. Y por otro lado, dotar de presión suficiente las instalaciones de riego, para poder regar y abastecer las 24.000 hectáreas de regadío de la Comunidad de Regantes.

"Sin la construcción de esas balsas, habrá agricultores de regadío consolidado, que verán pasar la tubería por su finca, y no podrán regar con ese agua, por falta de presión, por lo que lo que queremos son más hechos y menos palabras", reitera Antonio Navarro en alusión a las promesas de la Consejera mientras aún no hay ni un céntimo previsto para la instalación de esas necesarias balsas.

Desde el PSOE cifran en torno a un 70% de ese regadío consolidado, es decir, los propietarios de 7.700 hectáreas, quienes verán como una millonaria inversión de 20 Millones de euros, transportará el agua que ellos necesitan por sus fincas para no poder utilizarlas.

Desde el Partido Socialista, desde una perspectiva lógica y coherente, entendemos que si ahora se dispone de una partida de 20 Millones de euros para esa tubería, que se realice el tramo que corresponda, hasta donde llegue ese dinero, pero dotando al tramo que se realice de esas "balsas reguladoras". De lo contrario, se realizarán unas obras con un coste de 20 millones de euros, que dejaran sin servicio a más de 7.700 hectáreas de regadío.

Por todo ello, desde el PSOE reclaman al Alcalde que tome cartas en el asunto, y no permita que este proyecto se lleve a cabo tal como está diseñado, sino que se lleve a cabo de forma razonada teniendo en cuenta la construcción imprescindible de esas "balsas reguladoras".