La Edil de Oenegés ha explicado que se trata de recoger el testigo de las acciones anuales que se vinieron desarrollando en nuestro municipio años atrás, y que benefició a numerosos niños residentes en los campamentos del norte de África.

La Concejal de Oenegés en el Ayuntamiento de Lorca, Fátima Mínguez, junto al Presidente de la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de nuestra ciudad, Antonio García Ros, han informado esta mañana que el municipio se ha marcado el objetivo de recuperar para este verano el programa de acogida temporal de menores saharauis.

La Edil de Oenegés ha explicado que se trata de recoger el testigo de las acciones anuales que se vinieron desarrollando en nuestro municipio años atrás, y que benefició a numerosos niños residentes en los campamentos del norte de África. Cabe señalar que la población infantil saharaui, refugiada en los campamentos de Tindouf, sufre un déficit nutricional crónico, acompañado en muchos casos de niveles de anemia severos. Las altas temperaturas estivales, que acentúan esta inadecuada alimentación, también impiden el desarrollo social y lúdico de estos menores.

Fátima Mínguez ha manifestado que como muestra de la solidaridad del pueblo lorquino con el pueblo saharaui, queremos recuperar el programa "Vacaciones en Paz", que ofrece a familias de nuestra localidad la oportunidad de desarrollar una acción humanitaria de urgencia consistente en acoger a 8 menores de entre 8 y 12 años durante los meses de julio y agosto, para ofrecer

Una revisión médica global, incluyendo revisión vacunal, dental, ocular y auditiva de todos los menores.

La oportunidad de evitar los más de 50 grados centígrados de los campamentos durante los meses de verano.

Una alimentación equilibrada durante los meses de verano, que ayude a los menores a afrontar el invierno con más salud.

Un entorno acogedor y receptivo a diferentes culturas.

La oportunidad de vivir en otros entornos más afortunados que el que conocen los menores saharauis.

La oportunidad de aprender y mejorar el español, primera lengua extranjera en los planes de estudios de los colegios saharauis.

Actividades de sensibilización sobre la problemática del pueblo saharaui.

Los objetivos principales de esta acción son los de sensibilizar sobre la problemática de los refugiados saharauis, así como participar en la organización y seguimiento del programa de acogida de menores saharauis durante las vacaciones de verano, conocido popularmente como "Vacaciones en paz". Se persigue participar en el fomento y seguimiento del programa de continuación de estudios de jóvenes saharauis en España (proyecto Madrasa), además de promover campañas de ayuda humanitaria para enviar a los campamentos saharauis y fomentar y participar en la organización de acciones socio-culturales en los campamentos de refugiados.

La Concejal de Oenegés ha expuesto que la estancia de los niños será de 2 meses, desde primeros de julio a primeros de septiembre. Las familias que quieran participar en este programa deben posibilitar un entorno estable, afectivo y estimulante para los menores, así como garantizar la protección y custodia del menor, proporcionándole todo lo necesario para lograr que su estancia sea lo más adecuada posible, con el respeto a sus hábitos y cultura. Se comprometen, además, a facilitar al menor su inserción social activa en la vida de la comunidad.

Antecedentes inmediatos

Lorca está hermanada con la ciudad saharaui Wilaya El Aaiún. Hace 40 años que buena parte de la población saharaui se estableció en los campamentos de refugiados de Tindouf. Desde entonces están alimentados por organizaciones internacionales, como el Programa Mundial de Alimentos a través de la Media Luna Roja. Según la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) "la proliferación de emergencias humanitarias alrededor del mundo ha eclipsado la prolongada crisis de los refugiados saharauis y ha impactado de manera negativa en el apoyo de los donantes".

Los saharauis subsisten gracias al Programa Mundial de Alimentos (PMA), que aporta la cesta básica, que se compone de: 3 cereales (harina de trigo, cebada y arroz), 2 legumbres (lentejas y guisantes partidos amarillos), aceite vegetal, azúcar y súper cereal, un compuesto formado por maíz y soja. Esta cesta ya ha sufrido algunas variaciones para ajustarse al presupuesto, como sustituir las legumbres por otras más baratas o quitar las judías de la cesta. Se complementaba con 3 Kg/persona/mes de productos frescos (patatas, cebollas, zanahorias, fruta de temporada). La cantidad recomendada es de 12Kg/persona/mes. No obstante, el PMA ha alertado de falta de financiación, más de 7 millones de euros para completar 2015. Esto ha supuesto reducciones sucesivas de la cesta básica, lo que ha implicado importantes carencias en las familias; la cesta se agota a mediados de cada mes. Este tipo de alimentación prolongada en el tiempo y deficiente (sólo llega al 80% de la población) ha generado una serie de consecuencias:

Hay un 7,5% de niños y mujeres de entre 15 y 50 años con desnutrición severa.

El 60% de las mujeres sufren anemia. Los niños la presentan desde su nacimiento.

Casi el 30% de los menores presentan déficit de crecimiento lo que afecta a su desarrollo cerebral.

Este déficit nutricional se ve agravado por las condiciones climáticas del desierto de Tindouf, donde se encuentran los campamentos. Se trata de una zona inhóspita del desierto argelino, que sufre grandes variaciones climáticas del día a la no-che. Los meses más benignos son los de invierno, aunque las diferencias entre temperaturas mínimas y máximas son muy acentuadas (superiores a los 20 grados). En verano se mantienen estas diferencias entre el día y la noche, aunque en los meses de julio y agosto las temperaturas durante el día se sitúan en los 50 grados, descendiendo a los 30 por la noche. Estas condiciones impiden literalmente la vida durante las horas diurnas, a la vez que repercuten notablemente en el mantenimiento de los alimentos.