La Plataforma 'Stop cebaderos junto a las viviendas' insisten en la necesidad de agotar la vía política antes de llegar a los tribunales para lo que han solicitado una reunión con el alcalde del municipio, Francisco Jódar, a quien aún no han tenido posibilidad de plantearle su problemática personalmente
La Plataforma 'Stop Cebaderos junto a viviendas' ha lamentado que sus principales aportaciones a la futura ordenanza municipal del sector porcino hayan sido rechazas por el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Lorca lo que les deja en la misma situación de indefensión que tienen ahora mismo.
Desde la plataforma advierten que el aumento de la distancia de 5 a 15 metros entre viviendas y cebaderos que contemplará la futura ordenanza no respeta los derechos constituciones a la protección de la salud (art.43CE) y a un medio ambiente adecuado (art. 45 CE), en los que subyace el derecho de los ciudadanos a gozar de una calidad de vida que sea coherente con la dignidad de la persona, derecho fundamental reconocido en el artículo 10 de la Carta Magna.
Por ello, los afectados insisten en la necesidad de agotar la vía política antes de llegar a los tribunales para lo que han solicitado una reunión con el alcalde del municipio, Francisco Jódar, a quien aún no han tenido posibilidad de plantearle su problemática personalmente.
Los integrantes de la plataforma reiteran la obligación del Ayuntamiento de cumplir con la protección de los ciudadanos cuando éstos se ven afectados en sus derechos, tal y como contempla el Convenio Europeo de Derechos Humanos y la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, que obliga a los poderes públicos a mantener un justo equilibrio entre el interés económico empresarial y el derecho de los ciudadanos al disfrute efectivo de su domicilio y su vida privada y familiar.
La Plataforma asegura que establecer los 1.000 metros como la distancia óptima entre viviendas y explotaciones ganaderas(excepto las de carácter doméstico) es razonable, tal y como ha demostrado, por ejemplo, el Ayuntamiento de Caravaca de la Cruz, que así lo estableció en 2013 en su Ordenanza municipal reguladora de actividades pecuarias.
En ese sentido, aseguran que la concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de Lorca, Saturnina Martínez, no puede presentar como "pionera", una norma carente de valentía que no resuelve los problemas actuales ni dará respuesta a los que se generen en el futuro.