El Concejal de Fomento e Infraestructuras del Ayuntamiento de Lorca, Ángel Meca, y el Director General de Carreteras de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, José Antonio Fernández Lladó, han visitado esta mañana la conclusión de la reparación del Camino Real, en la que la Consejería de Fomento de la CARM ha invertido más de 202.000 euros con el fin de mejorar la conexión de las pedanías de Aguaderas y Purias con la ciudad, lo que beneficiará a los 3.000 vecinos que residen en ambos núcleos urbanos.
Ángel Meca ha señalado que "el tramo que vistamos hoy, y en el que se ha actuado, discurre paralelo a la rambla de Biznaga y comprende 3,4 kilómetros, además tiene su origen en el cruce con el camino de Catanga y el camino de Cañaveral. Las obras, que se han ejecutado durante cuatro meses, han consistido en la limpieza y restauración de los márgenes de la carretera y la reposición de los taludes necesarios para la reconstrucción de la berma. Cabe destacar que estas obras se incluyen dentro de las actuaciones previstas de renovación de núcleos rurales que se están realizando en todo el término municipal de Lorca. Estamos hablando de una batería de intervenciones que tiene como objeto la mejora de estas infraestructuras de comunicación entre nuestras pedanías y el casco urbano".
El Concejal de Fomento ha explicado que "las obras realizadas en estos últimos meses han puesto en valor esta importante vía de comunicación entre las pedanías y la propia ciudad, con la renovación del pavimento en la mayor parte de esta carretera, ya que el camino tenía numerosas roturas, socavones y hundimientos. Además, la actuación incorpora dos nuevas obras de drenaje transversal y también contempla la protección de la calzada en el paso de la rambla de Mesillo con lo que, se intenta evitar los daños en el pavimento de la carretera, que habitualmente se producen por la riada que provoca la incorporación de la citada rambla a la rambla de Biznaga.
Meca ha añadido que "dado el mal estado del firme se ha procedido a la renovación total del pavimento de rodadura en la mayor parte del tramo. Se ha obtenido una explanada de buena calidad mediante el escarificado y triturado del firme anterior para su posterior compactación. Sobre el mismo se ha dispuesto una capa de zahorra artificial de 10 cm que ha sido la base de una capa de rodadura de 8 cm de espesor. En la parte final del tramo, donde existían zonas con el firme en un estado más aceptable, se ha propuesto la reparación puntual de las zonas más dañadas y la incorporación de una capa de rodadura de 4 cm".
La pedanía de Aguaderas ya se ha beneficiado, dentro de esta serie de intervenciones, de una inversión de 2,45 millones que propició la mejora integral de la carretera D-8, un importante nodo de comunicación entre el casco urbano, la huerta y la costa lorquina, utilizada diariamente por 1.255 vehículos.