La fachada labrada en piedra del Palacio sufre el “mal del andamio vacío”
La fachada principal del Palacio de Guevara vuelve al debate político. Pedro Sosa, Portavoz del Grupo Municipal de IU-V en el Ayuntamiento de Lorca, quiere saber las razones por las que ese elemento tan singular del patrimonio cultural de Lorca está oculto tras un enorme cajetín de madera, sin que desde hace meses nadie trabaje en ella, y también se ha interesado por la responsabilidad de las empresas que han intervenido en su restauración, llevándose el dinero y empeorando el estado de tan singular elemento.
Sosa ha recordado que el inmueble, declarado en 2008 Bien de Interés Cultural con la categoría de monumento, es, tal y como se reseña en el decreto de su declaración, “uno de los ejemplos más sobresalientes del Barroco civil del levante español”. Esa catalogación contrasta, no es la primera vez que lo decimos, con la calidad y la efectividad de las restauraciones a las que ha sido sometida la fachada del Palacio en los últimos años.
A mediados del pasado siglo XX se realizó sobre la fachada una primera intervención que quiso atajar los problemas de humedad del edificio, sustituyendo parte del basamento del edificio por una piedra menos porosa que la original. Se trató de una buena intervención que contrasta sin duda con las dos o tres últimas realizadas en el inmueble.
Hace casi dos décadas la fachada fue sometida a una segunda intervención. Una empresa llegada de Cartagena se limitó a colocar un andamio en la portada del inmueble, que permaneció durante más de un año tapándolo sin ningún tipo de trabajo, para que en dos días, unos operarios llegados de Cartagena le dieran una mano de pintura, y su empresa, después de cobrar un pastón del momento, se largara.
Hace cuatro años, dentro del Plan Director de Restauración del Patrimonio Histórico de Lorca, la empresa Ferrovial en UTE con otra empresa, se adjudicó la restauración del Palacio de Guevara con un presupuesto de más de 587.000 €.
De nuevo, se pone el andamio, que permanece vacío la mayor parte del tiempo, se hacen las obras en unos pocos días y se llevan el dinero, y tres años después, esa fachada tan importante vuelve a presentar patologías como la alveolización de la piedra y la arenización acelerada de la misma como consecuencia de la humedad, que no fueron abordadas convenientemente en el proceso de restauración del edificio.
Patologías que han estado afectando a elementos significativos de la iconografía ornamental de la misma y que han hecho que una nueva empresa, en este caso Lorquimur, volviese a acometer trabajos de restauración sobre la misma..
Otra vez se pone el andamio, se interviene cuatro días y desaparecen los técnicos y trabajadores sin que nadie sepa qué han hecho, cuál es el resultado y por qué se sigue ocultando la fachada a la vista de lorquinos y turistas.
Sosa afirma que las obras que se acometan en un Palacio que es propiedad del Ayuntamiento de Lorca, deben ser supervisadas por los Gobiernos locales y éstos deben exigir responsabilidades a las empresas contratadas cuando su trabajo ha sido deficiente. Queremos saber qué está pasando con la última obra, queremos tener todos los informes de la administración pública cultural, queremos saber quién ha supervisado las últimas intervenciones y queremos un poder público al que no le tiemblen las piernas para exigir responsabilidades. Así se lo vamos a hacer saber tanto a la concejala de Cultura como al propio Alcalde de Lorca en el próximo Pleno Municipal.