La concejala de IU-Verdes, Gloria Martín, también da voz a los vecinos que denuncian incumplimientos por parte de la Comunidad de Regantes de Lorca. A diferencia de lo prometido, el ensanche del camino del brazal de Felí con motivo de la modernización de regadíos ha empeorado los niveles de seguridad en la zona
La concejala de Izquierda Unida Verdes, Gloria Martín, ha trasladado al equipo de Gobierno municipal del PP las quejas de los vecinos y vecinas del Camino Felí, en la pedanía de Cazalla, afectados por los importantes problemas de inseguridad vial que genera la mala señalización y la falta de arcenes.
Martín ha relatado que los cinco menores (el próximo año serán ocho) que utilizan a diario el transporte público escolar para desplazarse al colegio Virgen de las Huertas tienen que cruzar una carretera que no cuenta con ningún tipo de señalización que advierta del paso de escolares, ni con una marquesina que les proteja de las condiciones climatológicas y les aparte del tráfico rodado. Ni siquiera existe un arcén mínimamente acondicionado, por lo que el autobús tiene que parar en plena carretera. "Cuando llueve, las madres y padres tienen que esperar bajo la lluvia en un auténtico barrizal en el que ni siquiera pueden transitar con las sillas de bebé", explicó.
Por ello, la edil de IU-Verdes reclama que en este trayecto se habiliten paradas para el transporte infantil que ofrezcan la "máxima seguridad" a los escolares de este centro público.
Martín también ha pedido que se repinte la calzada y ha trasladado al equipo de Gobierno la demanda vecinal de instalar alumbrado público "al menos en la zona más urbanizada".
Incumplimientos de la Comunidad de Regantes de Lorca
Por otra parte, varios vecinos han denunciado incumplimientos por parte de la Comunidad de Regantes de Lorca respecto a las obras de modernización de regadíos que se llevaron a cabo con las aportaciones del Ministerio de Medio Ambiente. A diferencia de lo prometido, el ensanche del camino del brazal de Felí ha empeorado los niveles de seguridad en la zona, obligando a los afectados a transitar por la propia carretera ya que los márgenes no están uniformes y cuentan con numerosos socavones. Este hecho ha producido numerosos accidentes en personas de avanzada edad, alguno de los cuales ha tenido que ser hospitalizado tras una fuerte caída.
Además, los orificios practicados en las vallas de algunos propietarios para favorecer el desagüe de la vía, originan auténticas cascadas cuando llueve y la inundación de los terrenos particulares.
Otros vecinos fueron invitados a practicar un retranqueo en sus terrenos con la finalidad de ampliar el camino a cambio de que la Comunidad de Regante sufragara los costes de construcción de los muros de separación de la vía. Según los vecinos, este compromiso no se ha cumplido en todos los casos lo que ha supuesto un desembolso de miles de euros a los afectados.
Por todo ello, Martín ha pedido al equipo de Gobierno municipal del PP que se interese por la problemática que afecta a los vecinos del Camino de Felí y medie con la Comunidad de Regantes de Lorca para que atienda a los compromisos adquiridos en su día.