Pedro Sosa, concejal portavoz de Izquierda Unida Verdes en el ayuntamiento de Lorca, ha relatado esta mañana en rueda de prensa como la Administración local, pese a las advertencias previas de su grupo, sigue sin ejercer la labor de vigilancia que le corresponde en las obras de remodelación que se están llevando a cabo en la ciudad, en concreto en la Avenida Juan Carlos I.
El edil de izquierdas ha apoyado su afirmación en unas imágenes en las que se puede apreciar a los obreros que están trabajando en la remodelación, comiendo en la calle "tirados en la acera", tal como se hacía en el pasado siglo y en el anterior, incumpliendo así el convenio colectivo de los trabajadores de la construcción referente a la dotación de instalaciones higiénico sanitarias, en concreto el artículo 244.5, que establece que en las obras debe haber una caseta para el descanso de los obreros y para que estos puedan comer o prepararse comidas.
Sosa considera inadmisible que una empresa, Ferrovial, que cuenta con filiales en paraísos fiscales, "y que han venido aquí a llevárselo crudo" con la cantidad de importantes obras que les han adjudicado de remodelación tras los seísmos de 2011, tenga a los trabajadores en estas condiciones, sin que haya técnicos municipales que supervisen las obras; obligación legal que en reiteradas ocasiones hemos puesto de relieve desde IU-V Lorca, mientras que la actual edil de Obras, no sabemos por cuánto tiempo, Eulalia Ibarra, dice que sí se cumple esta labor de control, pero a la vista está, según el edil, "que o los técnicos no conocen la legislación laboral, o las obras no las inspeccionan".
Por ello, Sosa ha instado a los responsables municipales a que supervisen de una manera seria, todas y cada una de las obras que se están llevando a cabo en la ciudad, antes de que cumpla el plazo de vencimiento del préstamo BEI, a finales de año.
Por último, también ha resaltado que dada la escasa planificación por parte del equipo de gobierno de las obras que se están ejecutando y de las que quedan por hacer, como las Jerónimo Santa Fe o Alameda de Cervantes, ahora hay que acometerlas con mucha prisa, lo que lleva a las empresas adjudicatarias a hacer doblar turno a sus trabajadores, como ya denunció hace unas semanas que estaba sucediendo en las citadas obras de la Avenida Juan Carlos I por parte de Ferrovial, en lugar de contratar obreros para dos turnos, lo que les saldría más costoso. Ésto constituye otra flagrante violación de la legislación laboral, en palabras de Sosa, que ningún coordinador de seguridad se encarga de controlar y que en el caso de hacerse repercutiría favorablemente en el descenso de número de desempleados.