Los terremotos ocurridos en Lorca el pasado 11 de mayo no paralizaron la prestación de ayudas a las personas dependientes del municipio. Por el contrario, los obligados cambios de domicilio no han impedido que los beneficiarios sigan recibiendo la atención correspondiente, según afirmó esta mañana el director general de la Oficina de la Dependencia, Miguel Ángel Miralles, en la rueda de prensa celebrada en dicha ciudad.
La Consejería de Sanidad y Política Social, de quien depende la Oficina de Dependencia, ha incrementado su labor de cara a las personas afectadas por los seísmos y no ha paralizado ninguna de las ayudas ni procedimientos en marcha. Miralles recordó que el cambio de domicilio no justificado es una de las causas por las que se puede perder el derecho a la prestación “en este caso, por la excepcionalidad de la situación la Administración regional ha continuado ofreciendo los mismos servicios a las personas dependientes damnificadas, aunque se hayan visto abocadas a alojarse en otro domicilio sin poder comunicarlo en tiempo y forma”.
Por tanto, en todo momento, los beneficiarios afectados han seguido recibiendo sus prestaciones en aquellos domicilios provisionales. Otro tanto está ocurriendo con las valoraciones, que, según la normativa, deben realizarse en las viviendas de cada cual. A partir del 12 de mayo, un día después de la catástrofe, la Oficina de la Dependencia se adaptó a las circunstancias imperantes y, desde julio, una vez localizados los dependientes beneficiarios, procedió a llevar a cabo su labor en sus nuevos domicilios provisionales.
Miralles informó también que actualmente 1.584 lorquinos están recibiendo prestaciones por dependencia, de los cuales 1.110 son ayudas económicas en el domicilio. Asimismo, aprovechó para instar a que cualquier consulta por modificaciones en la situación del beneficiario o por dudas que puedan surgirles, la dirijan a los servicios sociales del ayuntamiento lorquino, ya que es la forma más directa.