El Alcalde de Lorca, Francisco Jódar, y la Directora General de Menor y Familia de la Comunidad Autónoma, acompañados de las Concejalas de Seguridad y Atención Social del Consistorio lorquino, Belén Pérez y Lali Ibarra, han abierto esta mañana la jornada formativa titulada “La realidad del maltrato infantil en el ámbito de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad: Protocolos de actuación”, en la que participarán casi un centenar de Policías Locales de la Ciudad del Sol.
Esta jornada formativa pretende optimizar la atención prestada desde el ámbito de los cuerpos de Seguridad a los menores en situaciones de desprotección. Para ello, se realizará un desarrollo del marco legal internacional, estatal y autonómico; así como explicará la forma de identificar las señales, indicadores físicos y comportamentales, que indiquen sospecha o constancia de maltrato, y comunicarlo a la entidad competente en la materia.
Según el Observatorio de la Infancia se entiende por maltrato infantil toda aquella acción, omisión o trato negligente, no accidental, que prive a los menores de sus derechos y su bienestar, así como que amenacen o interfieran su adecuado desarrollo físico, psíquico o social, cuyos autores pueden ser personas, instituciones o la propia sociedad.
El psicólogo de la Asesoría de Información y Estudios, Dirección General de Familia y Menor, Daniel Pérez, detallará a los agentes el Protocolo de actuación en la detección y notificación, que incluye una valoración inicial de la situación de desprotección, Procedimiento de actuación ante situaciones no urgentes y ante situaciones urgentes (cuando la vida del menor corre peligro o cuando su integridad física o psicológica se encuentre gravemente comprometida, esto es, cuando se cumplen los criterios de probabilidad de que el maltrato vuelva a repetirse).
En esta jornada se les ha entregado a los agentes un manual para el profesional, hojas de notificación de maltrato infantil y sus instrucciones de cumplimentación. Igualmente, se han analizado los factores asociados, los criterios comunes y compartidos con otros profesionales para valorar la gravedad de la situación y establecer la urgencia del caso, así como los procedimientos de actuación y comunicación con otros profesionales y cauces de notificación y derivación de los casos detectados.