El Concejal de Educación y Universidad del Ayuntamiento de Lorca, Jose Joaquín Peñarrubia, se ha reunido esta mañana con los directores de los colegios e institutos beneficiados por el Programa de Mediación Social en el Ámbito Escolar, que ha puesto en marcha por primera vez el Consistorio lorquino.
Peñarrubia ha informado que la Concejalía ya está trabajando para extender a nuevos colegios del término municipal este programa, que se realiza en colaboración con la Consejería de Educación de la Comunidad Autónoma y la Universidad Popular.
Los centros beneficiados serán los colegios públicos Andrés García Soler, José Robles, Sagrado Corazón, San José, Casa del Niño, Juan González y San Cristóbal, junto con los Institutos de Secundaria Ros Giner, Ibáñez Martín y Ramón Arcas.
Concretamente, este nuevo servicio atenderá a aquellos alumnos con más problemas de entre los 3.119 escolares de siete colegios públicos y 2.632 estudiantes de tres Institutos de Educación Secundaria de Lorca, para prevenir la violencia en el aula, además de facilitar la integración social y familiar, así como el acercamiento del alumnado absentista al centro.
Peñarrubia ha explicado que “con esta iniciativa pretendemos que los alumnos interioricen un método que les ayude a comprender las consecuencias de sus acciones y aprendan a gestionar sus comportamientos de un modo eficaz, al tiempo que reducimos al máximo los métodos disciplinarios sancionadores, estrechando la colaboración con las familias que puedan tener dificultad de asegurar la asistencia a clase de sus hijos”.
“Los objetivos de la mediación persiguen prevenir la violencia, intervenir frente al conflicto, formar para la convivencia, fomentar la reconciliación y mediar entre los equipos educativos y las familias”, ha añadido.
El proyecto se ha iniciado con la presentación del equipo de mediadores en los centros, para continuar con la intervención, prevención y el trabajo con los grupos conflictivos.
El Concejal de Educación está convencido de que estas actuaciones contribuirán a desarrollar un ambiente escolar favorable, asegurando y mejorando la comunicación entre las familias y el centro; además crear canales institucionales para la resolución de conflictos que permitan una gestión solidaria, autónoma y participativa. De igual modo, se enseñará a todos los miembros de la comunidad educativa distintas estrategias para la resolución de conflictos y promover la responsabilidad ante los mismos.
Entre las estrategias que se emplean en este programa se incluye la mejora de la autoestima y la disciplina, el desarrollo de habilidades de comunicación y el aumento del autocontrol entre los alumnos.