El medio centenar de vecinos del Caserío de Las Palas, en la diputación lorquina de La Tova, llevan sin agua desde el pasado viernes, a pesar de que tienen su pertinente contrato con la empresa Aguas de Lorca y "pagamos todos nuestros impuestos", según informó el presidente de la asociación vecinal, Gregorio Esteban.
El portavoz vecinal atribuyó este problema a cinco nuevos enganches de agua que el Ayuntamiento ha facilitado en las diputaciones de Ortillo y Parrilla. De ese modo, el agua, que procede del manantial de Tirieza, es "insuficiente" para el abastecimiento de todos los vecinos.
Esteban aseguró que ya venían teniendo dificultades y que incluso no había potencia de agua suficiente para que funcionasen los calentadores por lo que "llevamos semanas calentando agua en calderos para poder asearnos". Además, los vecinos de la zona tenían que concertar la hora a la que tenían que poner las lavadoras porque no podían funcionar simultáneamente. Sin embargo, desde hace cuatro días se encuentran "sin una gota de agua", según el representante vecinal.
Gregrio Esteban ha asegurado que los vecinos están dispuestos a llevar esta problemática a los tribunales. También han asegurado que durante tres meses intentaron, sin éxito, que les recibiera el concejal responsable, Melchor Morales, ante el que "hemos llegado a humillarnos para intentar que nos escuche". El portavoz vecinal aseguró también que intentaron que el alcalde, Francisco Jódar, se desplazara a la diputación para escuchar sus problemas pero que "nos envío al alcalde pedáneo, y él no ha venido por aquí en tres años". Por ello, los vecinos manifiestan que se sienten "discriminados" y se quejan por una falta de atención "que no sufríamos ni en la época de Franco", aseguró Gregorio Esteban.