Pedro Sosa, que ha sufrido laceraciones en el cuello y en el vientre, lamenta que los agresores no fueran detenidos a pesar de que, en presencia de agentes de la Policía local, siguieron amenazándole gravemente e intentando partirle la cabeza con piedras
El portavoz del Grupo Municipal de Izquierda Unida-Verdes en el Ayuntamiento de Lorca (Murcia), Pedro Sosa, fue objeto anoche de una brutal agresión física y verbal por parte de tres jóvenes, que se ha saldado con varias laceraciones en el cuello y en el vientre, aunque las consecuencias del ataque podrían haber sido irreparables.
Los hechos se produjeron después de que varios vecinos alertaran al concejal de que tres individuos llevaban "toda la tarde", al grito de "moros de mierda" e "hijos de puta", apedreando la fachada de la vivienda de una familia de origen marroquí en la calle Abellaneda del barrio de San Cristóbal, la misma en la que reside Sosa. Los residentes decidieron telefonearle después de intentar durante horas, sin éxito, que alguna patrulla de la Policía local acudiera a proteger a las víctimas.
El concejal de IU-Verdes se acercó a la vivienda para comprobar el estado en que se encontraba esta familia y valorar los daños materiales que la acción vandálica había ocasionado. En ese momento, los individuos volvieron a la zona y se lanzaron contra el concejal con palos y piedras de importantes dimensiones, causándole las lesiones.
Gracias a que otros vecinos acudieron a su auxilio y pudo zafarse de sus agresores, Pedro Sosa telefoneó al concejal de Seguridad Ciudadana, José Luis Ruiz Guillén, quien envió una patrulla de la Policía local, no sin antes afearle su posición en determinados asuntos del Pleno municipal.
La sorpresa mayúscula se produjo cuando los agentes no detuvieron a los agresores ni les practicaron prueba alguna de alcoholemia o de consumo de estupefacientes, tal y como el edil de IU-Verdes solicitó ante el evidente estado de embriaguez y agresividad en el que se encontraban. Tampoco lo hicieron cuando, ante la presencia de los policías, uno de ellos siguió amenazando gravemente al concejal y prosiguió con los intentos de agresión física.
Tras pasar por su centro de salud de zona y ya con el correspondiente parte de lesiones, a las 23.30 horas Sosa se personó en el cuartel de la Policía Local para intentar interponer una denuncia, pero fue advertido de que debería esperar al menos dos horas, por lo que se vio obligado a regresar a su casa para poder descansar antes de incorporarse en su puesto de trabajo a las seis de la mañana. La denuncia se presentará esta mañana.
Sosa ha dicho sentirse "absolutamente desamparado" ante un suceso que podría haberse saldado con consecuencias irreparables para la familia agredida que está aterrorizada y para él mismo. "Podían habernos matado de un golpe en la cabeza con una de esas piedras", aseguró.
El concejal de IU-Verdes dijo sentirse "hastiado" y "decepcionado" con un gobierno municipal (PSOE y C's) que no deja de mirar para otro lado ante los problemas de Lorca en general, y del barrio de San Cristóbal en particular. Y lanzó la advertencia, a título personal, de que o el Alcalde, Diego José Mateos, se toma los problemas de los vecinos en serio, "o no se comerá el pavo en el sillón de la alcaldía".
Sosa también ha recriminado el clima de "racismo y xenofobia" que está alimentando la portavoz de VOX, Carmen Menduiña, y que está generando tensiones vecinales de dimensiones imprevisibles en algunos barrios del municipio. "Estas son las consecuencias de su política del odio", aseveró.
Pedro Sosa recriminó a Menduiña que convierta en blanco de tiro a los vecinos de origen inmigrante y dijo que lo que San Cristóbal necesita es presencia de la Policía local en las calles para atajar la delincuencia que, como en su caso, no siempre es cosa de extranjeros.