IU convoca a sus militantes para hacer balance y adoptar medidas frente a un acuerdo de investidura que el PSOE con sus acuerdos con la extrema derecha ha dinamitado.
06.11.20. Las extrañas alianzas que ayer se hicieron visibles en el Pleno extraordinario del Ayuntamiento de Lorca convocado para aprobar las ordenanzas fiscales del municipio para 2021 "traerán cola", y, por lo que hace a Izquierda Unida de Lorca, provocarán las consecuencias que decidan los militantes de esa formación política que serán llamados en breve a realizar balance del acuerdo de investidura que IU firmó con el PSOE para hace alcalde de Lorca a Diego J. Mateos. Un acuerdo que, en opinión del Portavoz municipal de IU, Pedro Sosa, ha sido dinamitado por el alcalde de Lorca al haber llegado a acuerdos inconfesables con la extrema derecha de VOX para sustraerse así del cumplimiento de lo pactado con IU.
Las relaciones entre PSOE e IU llevaban ya tiempo marcadas por la distancia. Sosa sostiene que el Alcalde Mateos y sus concejales no sólo no cumplen con el contenido del acuerdo de investidura en todas sus materias, sino que en las más importantes de ellas caminan en sentido contrario a lo plasmado por escrito en ese acuerdo.
Empezaron incumpliendo sus compromisos con el medio ambiente. Unos compromisos que constaban escritos "negro sobre blanco" en el acuerdo de investidura con una claridad palmaria. Y así se opusieron a la tramitación del PORN de Cope-Calnegre para preservar los tesoros naturales de ese importante Parque Regional. El PSOE se alió aquí con la derecha política, con los especuladores y con los grandes empresarios agrícolas que llenan de basura y plásticos el Mediterráneo lorquino y aguileño. Lo hicieron además a contracorriente de las sentencias que habrían de llegar después desde el Tribunal Supremo, dando la razón a quienes históricamente hemos luchado por la preservación de los valores naturales de Cabo Cope-Calnegre.
Han incumplido los acuerdos en materia de protección del patrimonio histórico de Lorca. Resulta inconcebible, afirma Sosa, que la única inversión de dinero municipal que se ha hecho en el casco histórico de la ciudad sea para cargarse el empedrado histórico de la calle Selgas y sustituirlo por una capa de asfalto. Una actuación que nadie les ha pedido, que atenta contra el patrimonio de la ciudad de Lorca, que incumple las disposiciones de la normativa de patrimonio histórico español, incluido el PEPRI, y que va en dirección opuesta a lo que ciudades históricas de España y de Europa están implementando en sus municipios, que no es otra cosa que la protección y en muchos casos la reposición de sus empedrados históricos. No sólo no protegemos nuestro patrimonio, sino que nos gastamos el dinero en destruirlo.
En otro orden de cosas otro tanto ocurre con el contenido del pacto de investidura en materia de democracia participativa, democratización de instituciones como las de los alcaldes pedáneos y dinamización de consejos y mesas de participación social. Ni se ha invertido un euro en esta materia, ni aquí se mueve nadie. Esta política pública en Lorca está desaparecida por completo.
Y así podríamos continuar con la práctica totalidad de las materias acordadas en el Pacto de Investidura. Pero, continúa Sosa, si hay un asunto que con toda nitidez y claridad separa a la derecha de la izquierda política es sin duda la política fiscal y tributaria. Que el PSOE de Lorca haya aprobado las ordenanzas fiscales para 2021 con el apoyo de Ciudadanos (con quien ya gobierna) y de la extrema derecha de VOX, incumpliendo de modo palmario sus acuerdos con nosotros en este ámbito, es una línea roja que Diego José Mateos no debería haber cruzado.
Con esos compañeros de viaje por los que ha optado el PSOE, la mayoría de lorquinos van a pagar más tasas y más impuestos en 2021. Y la no tributación, la exención, la rebaja y la bonificación quedan esencialmente para dos colectivos: 1) los grandes empresarios de España que operan en Lorca (Iberdrola y las eléctricas, las empresas de telefonía y telecomunicaciones, Amazón, las grandes cadenas de supermercados, y las grandes fortunas…) que facturan anualmente millones de euros, y que hacen "palmas" a esas ordenanzas, y 2) los rentistas lorquinos; esas personas que sin trabajar, son propietarias de dos o tres (o cuatro) locales de negocios en los que no trabajan y por los que se pasan a cobrar a final de mes, "apretando" a centenares de hosteleros y autónomos lorquinos con el precio de los alquileres de sus locales de negocio.
Ese es el precio que les ha exigido VOX a cambio de su voto, renunciando en ese camino a incorporar la totalidad de las enmiendas de IU que pretendían, de conformidad con lo firmado en el acuerdo de investidura, revisar la estructura y el contenido de la imposición local al objeto de dotarla de justicia tributaria para que paguen menos quienes menos tienen, y más quienes más pueden.