La unión de PSOE y Vox condena a los lorquinos a pagar más hasta por llevar a los niños a la escuela municipal de música, y no ofrecen ningún tipo de ayuda real para que las familias lorquinas puedan hacer frente a la crisis económica y social que sufrimos.
La concejal de Economía y Hacienda en el ayuntamiento de Lorca, Rosa María Medina ha informado que PSOE y Vox se han unido en Lorca para subirle los impuestos a los lorquinos e inventar nuevas tasas que van a obligar a las familias a pagar más dinero hasta por llevar a los niños a la escuela municipal de música. Esta subida de impuestos y tasas municipales aprobada por la coalición entre PSOE y Vox destruirá empleo, empeorará la crisis y vaciará el bolsillo de los lorquinos, perjudicará especialmente a hosteleros, comerciantes y autónomos, a quienes abandonan a su suerte.
Estas ordenanzas muestran una indolencia y una despreocupación desconcertantes con los problemas de los lorquinos, impropias de cualquier administración. Están redactadas como si aquí no pasara nada, ajenas al sufrimiento de la gente.
Vox se ha entregado al PSOE en Lorca, uniéndose para subir impuestos, inventar más tasas y aprobarle las modificaciones presupuestarias que haga falta. El apoyo de Vox al PSOE en nuestra ciudad no sorprende, porque mucho atacar a Pedro Sánchez en Madrid, pero en Lorca son la muleta de Diego José Mateos, el alcalde del socialismo sanchista.
Son unas ordenanzas decepcionantes, mediocres, que no recogen ni la voz de la calle, ni las necesidades de la actual situación de emergencia social que sufren los ciudadanos. Con 6,5 millones de euros disponibles por superávit, 12 millones en tesorería del ayuntamiento, y totalmente libres de ataduras para gastar, porque se ha suprimido la regla de gasto, las ordenanzas fiscales castigan el bolsillo de la gente inventándose nuevas tasas, subiendo las existentes para servicios sociales, culturales y urbanísticos, además de no bajar ni el IBI, ni los recibos de agua y basura, ni el sello del coche. Nada de nada.
Esto no es lo que Lorca necesita. Como ejemplo concreto, los lorquinos deben saber que prevén recaudar 40.000 euros más sólo con las nuevas tasas para servicios sociales. Los lorquinos van a tener que pagar más por los cursos de la Universidad popular, servicios culturales, escuela de música y de artes plásticas, y crean un nuevo precio público por el uso del Teatro Guerra, Palacio de Guevara, Huerto Ruano y Fondo Espín, otra forma de meter la mano en el bolsillo de los lorquinos.
El ayuntamiento estaba en disposición de hacer mucho más, y en vez de eso abandona a su suerte a la gente frente a los efectos perjudiciales de la crisis socioeconómica y laboral que tenemos encima.
Nos encontramos con unas ordenanzas que reflejan el grado de compromiso con la gente: NINGUNO. Meten la mano en el bolsillo de la gente para seguir derrochando en caprichos y excentricidades, como la de gastarse 800.000 euros en coches, mientras los ciudadanos siguen soportando en sus espaldas el peso de la crisis sin que el ayuntamiento haga nada, o la de gastarse 500.000 para rescatar Limusa porque la han arruinado en un año. Si lo que quieren es ayudar a los comerciantes, hosteleros y autónomos lo que tienen que hacer es garantizar que van a recibir ese dinero, porque la rebaja del IBI planteada sólo beneficia a los propietarios de los locales, que, en su inmensa mayoría, no son los afectados, sino los dueños del inmueble, es decir, gente que sí dispone de recursos. Una auténtica chapuza, resultado de un nefasto planteamiento.
Estas ordenanzas destruirán empleo y acentuarán las consecuencias de la crisis. Han sido redactadas de espaldas a la gente, ignorando totalmente la verdadera situación que está afectando a los lorquinos, y evidencian que el actual gobierno local está levitando, ha levantado los pies del suelo, y no sabe lo que están padeciendo las familias.
Es inaceptable que no bajen el IBI, es impresentable que no ayuden a las familias lorquinas bajando la tasa de basura y el recibo del agua, ¿dónde está el apoyo de estos partidos ante la gravísima situación que sufrimos? Estas ordenanzas muestran una indolencia y una despreocupación desconcertantes con los problemas de los lorquinos, impropias de cualquier partido político. Están redactadas como si aquí no pasara nada.