• Gil Jódar: "la documentación a la que hemos tenido acceso confirma que el alcalde del PSOE tenía pleno conocimiento de lo que estaba ocurriendo e impulsó la celebración del acto fallido convocando dos Juntas de Gobierno y aprobando un gasto de 74.000€ a apenas unas horas de la celebración del evento fallido".
El presidente del Partido Popular de Lorca, Fulgencio Gil, ha afirmado que la documentación relacionada con los escándalos del gobierno de Diego José Mateos confirma que el actual alcalde tenía pleno conocimiento de todas las cuestiones relacionadas con los escándalos Madrid y Pérez Casas, por lo que es "normal" que la Fiscalía haya incoado diligencias de investigación sobre su equipo de gobierno.
Todo el mundo es consciente de que Mateos sabía de lo que estaba ocurriendo desde el primer día, por lo que resulta absurdo y estéril que a estas alturas pretenda hacernos creer que él simplemente pasaba por allí. Esto es un serial vergonzoso y ridículo que incluye una "vendetta" contra su inseparable pareja política durante los últimos cuatro años. Han sido un binomio inseparable y feliz, paseando juntos por todos sitios, realizando presentaciones y actos públicos, pero ahora quiere hacernos creer que él sólo "pasaba por allí".
Estos escándalos han ocurrido en el gobierno del PSOE en el ayuntamiento de Lorca, no en "una nave extraterrestre". Mateos montó dos juntas de gobierno y ya veremos si alguna reunión más para sacar adelante el evento. Mateos aprobó un gasto de 74.000 euros a menos de 24 horas del acto en Madrid y Mateos mintió a los presidentes de las Cofradías el día después del fallido evento, afirmando que la cancelación se debía simplemente a "un retraso en el procedimiento administrativo".
Mateos está montando ahora un serial como gran cortina de humo para desviar la atención de lo verdaderamente importante, que él ha sido conocedor, promotor y patrocinador de todo, montó juntas de gobierno, dio indicaciones de cómo había que "blanquear" el evento, y mintió claramente durante toda la semana hasta que el viernes le explotó el escándalo en su propia cara. Al día siguiente de la cancelación del acto, reunió a los presidentes de las Cofradías y les mintió, afirmando que todo se debía a un retraso en el procedimiento administrativo.
Por su formación profesional como secretario de ayuntamiento, nadie se cree que no fuera conocedor de que los mantos y bordados también habían viajado sin seguro, ni del resto de disparates que rodean este escándalo. Ahora, después de cuatro años de luna de miel, asistimos a un divorcio con tintes de repudio, Mateos tiene que asumir las mismas responsabilidades que exige a su compañero de viaje.