Las declaraciones del Alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, sobre el Casco Histórico, en las que declara que se protegerá solo lo necesario, es decir, los Bienes de Interés Cultural y las edificaciones protegidas con Grado 1, ponen en peligro el que fuera declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1964
Recientemente el Alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, ha realizado unas declaraciones a la prensa sobre el Casco Histórico que han alarmado a trece asociaciones de Lorca de la Plataforma por la Calidad del Paisaje de Lorca. En ellas declara que se protegerá solo lo necesario, es decir, los Bienes de Interés Cultural y las edificaciones protegidas con Grado 1. (Fuente La Verdad). Considera también que no es correcto el grado de protección único que se le dio al conjunto y pone en duda la catalogación al afirmar que se han hecho según «criterios dudosos», alegando también que se deben eliminar algunas de las protecciones. Estas y otras declaraciones son las que han preocupado a estas asociaciones del municipio, ya que el Casco Histórico de Lorca fue declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1964 precisamente por tener «sus calles un especial carácter de unidad y nobleza (…) las obras de arte que se atesoran en estos palacios, y el ambiente, en fin, de singular belleza que rodea a toda la población» (extracto del Decreto de Declaración como BIC).
Numerosas calles del privilegiado Casco Histórico de Lorca ya perdieron bastante identidad en el Siglo XX con edificios de diferentes gustos y estilos
Desde la Plataforma por la Calidad del Paisaje de Lorca afirman que hacer lo que el Alcalde ha dicho es un auténtico suicidio para la ciudad ya que supondría perder lo poco del Conjunto Histórico que se conserva y un fuerte varapalo económico y laboral a corto y medio plazo. Por su parte, la Asociación Lorca por su Patrimonio Cultural añade varios extractos de la Ley de Patrimonio Español en los que se dice que «excepcionalmente, el Plan de protección de un Conjunto Histórico podrá permitir remodelaciones urbanas» y que «la conservación de los Conjuntos Históricos declarados Bienes de Interés Cultural comporta el mantenimiento de la estructura urbana y arquitectónica, así como de las características generales de su ambiente. Se considerarán excepcionales las sustituciones de inmuebles, aunque sean parciales». Por lo tanto, la normativa debe ir encaminada a conservar los valores por los que le fue otorgado este privilegio y no a modificarla «a la carta», según los intereses del mercado.
La destrucción tanto del patrimonio arquitectónico (interiores y exteriores) como del patrimonio arqueológico que esconden sus cimientos para construir edificios de nueva planta tendrá también un enorme perjuicio económico a Lorca ya que el escaso turismo que recibe la ciudad se verá abocado casi a su total desaparición, teniendo en cuenta que el año pasado nos visitaron tan solo 153 355 personas (según cifras oficiales del INE). Esto hará que muchos negocios, y principalmente la hostelería, no puedan ver aumentadas sus ganancias al no tener turistas que consuman sus productos.
...con este nuevo documento se destruirán los más de 5500 años que atesoran el suelo y los edificios de Lorca y que la verdadera riqueza con capacidad de atraer el tan ansiado turismo
Finalmente, recuerdan desde Lorca por su Patrimonio Cultural y la Plataforma por la Calidad del Paisaje que con este nuevo documento se destruirán los más de 5500 años que atesoran el suelo y los edificios de Lorca y que la verdadera riqueza con capacidad de atraer el tan ansiado turismo está en los restos arqueológicos y en los interiores de la casonas históricas, no solo en sus fachadas y entorno. Derribar estos inmuebles conlleva además la destrucción de los paisajes urbanos protegidos por Ley como ya ocurrió en La Corredera.
Un Casco Histórico salpicado de edificaciones claramente modernas dejaría de ser Conjunto Histórico y por tanto menos atractivo para los visitantes