Tres dispositivos de cámaras de vídeo recorren los conductos que forman la red de drenaje urbano
El sistema cuenta con 500 kilómetros de tuberías enterradas, las más profundas a cinco metros bajo tierra; otras discurren cerca de la superficie, a tan solo 50 centímetros
Tres cámaras inspeccionan -en estos momentos- el sistema de alcantarillado de Lorca para verificar su estado; y es que bajo las calles del municipio discurre todo un entramado de conducciones subterráneas.
"Son casi 500 kilómetros de tuberías enterradas, las más profundas, a cinco metros bajo tierra; otras discurren cerca de la superficie, a tan solo 50 centímetros", recordabael concejal de Aguas de Lorca,Ángel Meca. Junto a él, el gerente de Aguas de Lorca, Antonio Franco.
Ambos daban a conocer los trabajos de inspección de todo el sistema de alcantarillado de la ciudad, que se está intensificando este mes para verificar el buen estado de la red. Cabe recordar que "la función de este sistema de tuberías es evacuar las aguas residuales y pluviales y conducirlas a las estaciones de bombeo y depuradoras. Aguas de Lorca se encarga de que estén en buen estado, limpias y sin obstrucciones, para que puedan cumplir su cometido", añadía Ángel Meca.
Para desarrollar estos trabajos de inspección de las conducciones subterráneas, la empresa mixta cuentacon tres dispositivos de cámaras de vídeoque recorren los conductos que forman la red de drenaje urbano:una cámara manualpara tuberías de un diámetro inferior a veinte centímetros;una con pértigapara las conducciones en los pozos de registro yuna robotizadapara las conducciones de diámetro superior a veinte centímetros.
En la planificación de los trabajos de inspección, se elige el dispositivo más adecuado según el diámetro de la tubería, que son variados dentro del municipio de Lorca.
La cámara manual está compuesta por una pantalla de visualización panorámica con iluminación por LED integrada y un cable con varilla de fibra de vidrio.
La cámara que se utiliza para la visualización del interior de los pozos y arquetas lleva una pértiga telescópica de hasta 6 metros, una tablet y dos focos luz led de gran intensidad.
La cámara robotizada está teledirigida por un operario mediante un joystick que inspecciona la tubería para determinar su estado estructural, estanqueidad e inclinación; y toda esta información se muestra en las pantallas de vídeo instaladas en el vehículo desde donde opera el robot y queda registrada para su posterior análisis.
Además de taponamientos de las conducciones, producidos por un problema en la inclinación, por juntas de unión abiertas o por el uso improcedente de toallitas; las cámaras pueden detectar fisuras que requieran una reparación mediante técnicas de rehabilitación con o sin zanja.
Para Antonio Franco, gerente de Aguas de Lorca, "estas son unas tareas esenciales para el correcto funcionamiento de los sistemas de alcantarillado domiciliarios, al permitir que la red se encuentre en las mejores condiciones".